Lo entendés cuando lo ves. Nada de sutilezas, nada de medias tintas. El prehistórico es un salame para comensales que saben lo que quieren. Directo, contundente, sincero. De sabor potente, para morder con ganas, con convicción. Como si estuvieras por salir a cazar un mamut.
Siempre hay un momento chill, no importa cuando. Fratello está allí para ayudarte a disfrutarlo.